Frente al reto de crear la imagen para una clínica dental, nuestra propuesta plantea una fachada interior que contraste con el tradicional barrio madrileño de Ciudad Lineal.
Frente al reto de crear la imagen para una clínica dental, nuestra propuesta plantea una fachada interior que contraste con el tradicional barrio madrileño de Ciudad Lineal.
Una calle interior es nuestra propuesta para la primera clínica dental Kenna en Madrid.
Frente al reto de crear la imagen para una clínica dental, nuestra propuesta plantea una fachada interior que contraste con el tradicional barrio madrileño de Ciudad Lineal.
Igual que Josef Albers en su cuadro “Un día luminoso”, la propuesta construye una fachada interior radicalmente distinta al marco exterior, dejando controladamente apreciar cómo se habita esta nueva piel en su interior. Con el fin de evidenciar esta diferencia, se escoge el acero inoxidable para su materialización.
Esta fachada genera una nueva circulación en el local, un nuevo dentro-fuera, una nueva calle. Esta circulación permite apreciar desde el exterior el funcionamiento de la clínica e invita a entrar al paseante. Los reflejos del acero inoxidable permiten meter la vegetación exterior dentro del local y reflejar la luz solar dentro de la nueva calle.
Dentro de la modulación de esta piel proyectamos piezas opacas, traslúcidas y transparentes según el grado de privacidad de cada estancia. La privacidad de cada estancia clínica determina la permeabilidad de la nueva piel. De esta manera, un vidrio transparente marca la entrada a la sala de espera o una puerta de madera genera el acceso a los gabinetes.
Al final de la calle interior, en torno a una pequeña zona de espera, un hito de color marca el acceso a la sala de rayos y el aseo. Junto a esto, una puerta da acceso a la zona privada de personal.
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Our proposal for the first Kenna dental clinic in Madrid draws inspiration from an “interior street.”
Faced with the challenge of creating the image for a dental clinic, we propose an interior façade which contrasts with the traditional character of the Ciudad Lineal neighbourhood in Madrid.
In the spirit of Josef Albers’ work “A Luminous Day,” the proposal shapes an interior façade that breaks away from the external surroundings, allowing glimpses of the inner life of the space in a controlled manner. To highlight this contrast, stainless steel was chosen as the primary material.
This façade redefines the circulation within the space, creating a new concept of “inside and outside” – a new street. This pathway allows the clinic’s internal activity to be observed from the outside, inviting passersby to enter. The reflections from the stainless steel incorporate the exterior vegetation and reflect sunlight, enlivening the new interior street.
The modulation of this new façade includes opaque, translucent, and transparent elements, according to the level of privacy required in each area. In this way, transparent glass marks the entrance to the waiting room, while a wooden door safeguards access to the treatment rooms.
At the end of the interior street, around a small waiting area, a point of colour highlights the entrance to the X-ray room and the restroom. Next to this landmark, a door leads to the private staff area.